27 nov 2014

No apta para autómatas


Siempre la misma ventana.
No sé qué significa, a qué me recuerda, qué pretende; qué pretendo.



Siempre la misma ventana, me engancha, me hace querer arrancarle las nubes y desnudarle cielo, grabarme sus colores en la piel y en la mirada, mirarla con cautela y de lejos y, también, mirarla de cerca. Me siembra expectativas, me disipa dudas. 
Siempre la misma ventana, aunque casi todos pasen de largo y me miren como si la observación fuera algo raro, algo extraño, algo nuevo, algo prohibido (quizás aquí lo sea). 
Siempre la misma ventana, más o menos a la misma hora, durante casi cinco años, me atrae, me atrapa, me hace creer que todo va bien, que todo irá mejor, que subir todas esas cuestas y todas esas escaleras merece la pena, que si yo me fijo en ella y sigo sonriendo con su dégradé pastel es porque no todo está tan perdido, tan mal, ni tan roto, porque queda mucho por hacer, porque aún se puede marcar una pequeña diferencia entre tanto ser mecanizado subiendo y bajando. 

Siempre la misma ventana, su dégradé pastel y mis jodidas esperanzas.

5 nov 2014

Words and worlds.


"I'm the girl who is lost in space, the girl who is disappearing always, forever fading away and receding farther and farther into the background. Just like the Cheshire cat, someday I will suddenly leave, but the artificial warmth of my smile, that phony, clownish curve, the kind you see on miserably sad people and villains in Disney movies, will remain behind as an ironic remnant. I am the girl you see in the photograph from some party someplace or some picnic in the park, the one who is in fact soon to be gone. When you look at the picture again, I want to assure you, I will no longer be there. I will be erased from history, like a traitor in the Soviet Union. Because with every day that goes by, I feel myself becoming more and more invisible..."
* Prozac Nation







También en: Caffeine-Magazine